Sin embargo, los gastos sociales totalizaron 2.968 millones de dólares, mostrando un crecimiento de 27,6 por ciento respecto al año 2011. Aun así, los gastos no sociales alcanzaron un total de 3.519 millones de dólares, siendo así 69,6 por ciento superior al monto registrado en ese concepto durante el 2011.
Si se analiza con mayor detalle la composición del gasto social, se puede notar que los gastos con mayor participación en el total son los desembolsos destinados a educación (39,6%), salud (23,1%) y los gastos en promoción y acción social (17,5%).
Los gastos que se encuentra aún entre los de menor participación dentro del gasto social se encuentran los de viviendas y servicios comunitarios a los que se destinaron 62 millones de dólares, y ciencia y tecnología a los que se destinaron 22 millones de dólares.
En cuanto a los gastos corrientes, estos totalizaron aproximadamente 4.056 millones de dólares durante el 2012, superando así en 29 por ciento a los gastos corrientes realizados en el 2011.
El gasto realizado en concepto de servicios personales en 2012 fue el principal componente, representando aproximadamente 60 por ciento del mismo. Esto equivale a decir que durante el último año los gastos en servicios personales totalizaron 2.433 millones de dólares, e implica un crecimiento de 34% respecto a lo gastado en este concepto en el año 2011.
En cuanto a los ingresos tributarios, estos reportaron un crecimiento de sólo 9 por ciento durante el año 2012, muy por debajo del promedio de crecimiento del 25 por ciento que se registró en los nueve años anteriores.
Si se analizan los componentes de los ingresos tributarios durante el año 2012, se puede ver que el Impuesto al Valor Agregado (IVA) es la principal fuente de ingresos tributarios recaudando 1.651 millones de dólares, seguido del impuesto a la renta que recaudó 677 millones de dólares, los aranceles al comercio exterior por el que se percibieron 383 millones de dólares, y el impuesto selectivo al combustible que sumó durante ese año ingresos por un total de 348 millones de dólares.
La presión tributaria, en los dos años siguientes reveló una disminución, alcanzando 13,2 por ciento en el 2011 y 12,3 por ciento en el 2012.